La economía colaborativa es una realidad y no es posible ir atrás. La misma comunidad Europea legislara sobre ella no mas tarde de Septiembre. Es la oportunidad para la gente que tiene buena voluntad de trabajar para si mismos y salir de la crisis o poder llegar al final del mes, hay que regularla para evitar abusos, como con todo desde cuando hemos entendido que ir al infierno ya no era suficiente como deterrente. Si quieres saber mas sobre ella esta es la organización que conosco que tiene mas informacion
http://magazine.ouishare.net/es
A mi personalmente me encanta, desde cuando la he descubierta la utilizo y soy miembro activo de ViA. Yo uso: bicicleta compartida (bicing), llar compartida (Airbnb), clases compartidas (Barcelona Activa, cibernarium, “millor que nou”), oficina compartida (co-working), viajes compartidos (bla bla car), car sharing (Avancar, Social Car), taxi compartido (uber), vestidos compartidos (intercambio vestidos de segunda mano, lo que es viejo para ti es nuevo para otro y viceversa), intercambio objectos de segunda mano (lost&found, fleadonia, wallapop) todo lo que tengo en mi casa es de segunda o más manos... Si seguimos con el consumerismo no llegamos a ningún sitio, yo vendí mi coche cuando me mudé a Barcelona. No tener vínculos con las cosas materiales aporta una mejora de calidad de vida y una libertad que no hay vuelta atrás...y de hecho me gustaria tener mas, por ejemplo me gustaria vivir en una casa donde tendría mi espacio privado y compartiria: terrazza/jardin, lavanderia, servicios en comun, una cocina mas grande y funcional, lugares de ocio, trabajo y descanso, etc...para tener mas pagando menos. Soy sola, soltera y sin nadie no necesito una lavadora para mi sola, no quiero compartir piso a 44 años, pero si me gustaria colaborar con mis vecinos como si fuese una familia, de hecho ya lo hacemos y gracias a dios los tengo. Yo desde cuando me he quedado sin trabajo, he empezado a alquilar 1 habitación en mi casa para llegar a fin de mes y en el mientras buscar otro trabajo que me guste, pago los impuestos, mis vecinos me ayudan (de hecho lo compartimos todo tambien me tiraron un cable de la luz cuando Endesa me dejo 10 dias sin luz por un error de potencia del contador), las tiendas del barrio están más felices y mi dueño no tiene que buscarse otro inquilino que mejor que yo no va a encontrar y yo puedo seguir viviendo en la ciudad que amo con la gente que amo.
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